Un juez detuvo temporalmente la subasta de Graceland, la legendaria mansión del "rey del rock" Elvis Presley, en Tennessee. La medida se tomó luego de que la nieta de Presley, Riley Keough, presentara un recurso legal para impedir la venta.

Aparentemente, la empresa Naussany Investments & Private Lending planeaba subastar Graceland, argumentando que la madre de Keough, Lisa Marie Presley, la había ofrecido como garantía de un préstamo en 2018. Sin embargo, Keough aseguró en su demanda que los documentos del préstamo eran falsificados.

Ante esta situación, el juez JoeDae Jenkins del condado de Shelby decidió frenar la subasta hasta aclarar la autenticidad de los documentos. Graceland es considerada una propiedad única bajo la ley de Tennessee, por lo que su pérdida sería un daño irreparable, según se indicó.

La compañía encargada de gestionar los bienes de la familia Presley, Elvis Presley Enterprises Inc., celebró la decisión judicial, asegurando que Graceland seguirá siendo "un santuario para los fans de Elvis de todo el mundo".